PARA ELEGIR UN TRAJE DE NEOPRENO ADECUADO DEBES TENER CLARO TUS OBJETIVOS Y NIVEL DE NATACION
El pasado fin de semana recibo una llamada de uno de mis alumnos triatletas que entreno en la parte técnica, acababa de terminar un triatlón de distancia olímpica, se encontraba exultante porque al fin había bajado su tiempo en el tramo de natación. Antes de darle la enhorabuena le pregunté, sin saberlo con seguridad, ¿O sea que me has hecho caso y te has comprado un neopreno nuevo, no?..
Luego de las risas, y analizando en profundidad, vimos que había bajado su promedio de 100 metros en más de 5 segundos. Según me había comentado con este nuevo traje tenía más movilidad, podía alargar más su brazada con facilidad, y por lo tanto realizaba un rolido más eficiente consiguiendo de esa manera nadar con menor resistencia al avance.
Cabe destacar que este triatleta, que ha comenzado a nadar de mayor, había logrado corregir su posición corporal mejorando la patada, y por tanto el anterior neopreno que le otorgaba más flotabilidad, le estaba perjudicando más que ayudando al quitarle movilidad. En algunos casos, hasta ese punto puede influir llevar un neopreno adecuado, o no.
Si eres un nadador o triatleta experimentado sabrás cual es el que mejor se adapta a tu técnica, objetivo, nivel, prueba. Pero en los inicios se nos plantean más de una duda, igual que cuando contamos con algo más de experiencia y queremos cambiar de neopreno. Nos surge entonces la gran pregunta.. ¿y ahora con cual me quedo?
COMO ELEGIR TU NUEVO TRAJE
No voy a hablar de marcas, hay muchas y buenas, me parece más útil aportar diferentes criterios que considero más importantes a la hora de decidir el tipo de traje, como son los objetivos y tu nivel de natación.
El neopreno a veces puede ser de uso obligatorio, opcional o prohibido en triatlón y travesías en función de la distancia y las condiciones del agua. Pero en caso de estar permitido, su uso puede ser también necesario en función de nuestras características físicas y técnicas.
La función principal del neopreno es la de protegernos del frío, pero nadar con traje produce cambios que influyen en nuestra posición corporal en el agua, en nuestra manera de nadar y en nuestro rendimiento, mejorándolo notablemente si no somos grandes nadadores. Es por ello que debemos elegir el más adecuado para nosotros.
Nivel de natación
En un principio los nadadores experimentados necesitarán menos flotabilidad al tener buena técnica y una gran adaptación al medio acuático. Ellos buscarán un traje que les aporte mayor flexibilidad para tener mayor libertad de movimientos y poder así exprimir sus cualidades.
Los que no han sido nadadores, que se han iniciado más tarde y tienen una técnica menos depurada, pero se sienten cómodos en el agua, optarán por un neopreno que les aporte flotabilidad y estabilidad, logrando así más libertad de movimiento en las brazadas facilitando el deslizamiento.
Para los principiantes y/o que les cueste mantener una buena posición en el agua, es aconsejable optar por el de mayor flotabilidad para compensar este aspecto.
Objetivos
Este es otro aspecto que habrá que tener en cuenta a la hora de decidirnos. No es lo mismo nadar 1.500 m que nadar 4.000 m, 8.000 m…etc. El tiempo de nado es mayor y por tanto el cansancio también.
La fatiga puede reducir la fuerza que realizamos al avanzar y también puede variar nuestra posición siendo esta menos eficiente. Si tu objetivo son las distancias largas, es posible que necesites un extra de flotabilidad.
Hay trajes que ofrecen más detalles para competición, y otros más enfocados a recreación y nado sin objetivos profesionales.
Ten claro para qué vas a utilizar tu traje. Algunos llevan más detalles enfocados a triatlón, y otros modelos están más orientados a la natación en aguas abiertas.
Si tienes en mente practicar ambos deportes, un neopreno para triatlón te servirá perfectamente
Otros detalles a tener en cuenta:
Talla
El traje de neopreno debe ir ajustado al cuerpo, de lo contrario, nos entraría mucha agua. Si es la primera vez que te vas a poner un neopreno, es posible que sientas una sensación extraña, como de agobio. No te preocupes, pasará. Consulta bien la talla en la guía o déjate asesorar por alguien experimentado. Cuidado con lo de que “hay que comprarse un número menos de tu talla”. Falso, irás nadando demasiado incómodo y no te favorecerá en nada.
Entrenar con neopreno
No es nada recomendable llegar a una prueba sin antes haber entrenado un tiempo con el traje. Como he comentado, el neopreno varía nuestra manera de nadar y es muy importante acostumbrar previamente nuestra musculatura a este cambio.
Entrena con él en la piscina hasta que puedas probarlo en aguas abiertas.
Modelos y gamas
Todos sabemos que los precios no son especialmente bajos, pero hoy en día tenemos la suerte de tener gran variedad de modelos que se ajustan a las necesidades y posibilidades de cada nadador. "Un traje caro no es garantía de nada si no es el adecuado para ti".
MI OPINION:
Reconozco que no me gusta nadar con neopreno, es más, con gorro tampoco. Soy de aquellas épocas en las que los trajes eran de uso exclusivo de los buceadores; cuando las boyas estaban hechas de latón y la mitad flotaban semi hundidas, toda una odisea localizarlas.
Afortunadamente los tiempos han cambiado, para mejor, y hay que adaptarse a las actuales normativas, así que no queda otra que hacerse con un traje. Por suerte la tecnología colabora en gran medida para que nademos cada vez más cómodos.
En mi caso prefiero un traje con mucha movilidad, sobre todo en los hombros. Tiro mucho de brazos e intento alargar bien la brazada para obtener un nado fluido y eficiente. He probado muchas marcas en todos estos años, gama alta, intermedia y baja, para experimentar. "Es fundamental tener las expectativas claras, sobre todo para tu bolsillo".
Teniendo en cuenta mis características actuales, he buscado un equilibrio entre flotabilidad, especialmente para la zona del tren inferior (casi siempre utilizo patada de dos tiempos debido a que una lesión no me permite otro ritmo), y libertad de movimientos en la zona de hombros para facilitarme el recobro y la brazada.
No te olvides de probar tu traje en agua dulce, o en la piscina primero, y en el mar. El agua salada tiene mayor densidad y tienes que experimentar sensaciones.
Y RECUERDA: "Desde mi punto de vista el neopreno es otro accesorio, importante por supuesto, pero por si solo no te ayudará en la competición. Por muy bueno que sea tu traje, lo que más influye es tu preparación técnica, física, y tu estrategia".
“APRENDER A PERDER ES LA PRIMERA DE LAS VICTORIAS”: COMO PADRES DEBEMOS ENSEÑAR A GESTIONARLO
Cuando un niño vuelve de una competición y llega enfadado porque no ha tenido el resultado que esperaba, normalmente sus padres le tranquilizan y le dicen: "tranquilo, lo importante es participar". Qué bien suena ¿verdad?, pero ¡qué difícil de llevar a la práctica! No vale decirle al niño que no pasa nada por perder, que lo importante es participar, y luego soltamos improperios y descalificativos cuando no nos sale algo bien, o cuando nuestro equipo pierde, por ejemplo. ¡El niño se siente engañado!
Así, nos encontramos niños que si sospechan que van a perder les cuesta ir a competir, otros se rinden antes de acabar la prueba, otros se desmotivan y quieren abandonar. Otros no admiten que la causa de sus malos resultados sea culpa suya, una falta de esfuerzo o que el otro ha sido mejor. Buscan alguna excusa que justifique esa situación o culpan a alguien de lo que ha pasado (es muy habitual oír a los niños "me han suspendido" en vez de "he suspendido") y se pillan un enfado un tanto desproporcionado.
Para mí, este aprendizaje debe hacerse desde muy pequeño, cuando el niño empieza a jugar con sus padres. En muchas ocasiones éstos le dejan ganar para que el niño no se frustre y se sienta bien. Esto no está mal, a veces hay que dejarle ganar para que el niño tenga interés en mejorar, pero también hay que dejar que pierda para que no se crea que él todo lo puede, y luego se lleve un chasco con sus amigos que seguro no le van a dejar ganar.
El hecho de que el niño se enfade cuando pierde es una reacción normal. A nadie le gusta perder, y menos a un niño. Ellos lo viven como un fracaso, y como viven en el presente, el futuro les queda muy lejos, y por tanto les cuesta darse cuenta que "perder una batalla no significa perder la guerra". Uno siempre puede volver a intentarlo en otro momento, pero hay que estar preparado para ello.
MI OPINION:
Como padres debemos tener en cuenta una serie de aspectos:
A ningún padre le gusta ver sufrir a su hijo, y a todos nos gustaría que nuestro hijo fuese el mejor, pero no puede ser. La vida no es siempre un camino de rosas y por tanto los niños tienen que aprender a tolerar la frustración y a sobreponerse de ella. Además, tienen que saber asumir la victoria, y que no se crean más de lo que son.
¿Y LA BOYA?...SI ERES NADADOR DE AGUAS ABIERTAS TE LO HABRAS PREGUNTADO ALGUNA VEZ
Sí, muchos ya hemos desempolvado el neopreno, otros lo vamos a estrenar, algunos lo tenemos previsto para comprarlo en breve. La temporada de aguas abiertas, triatlones y demás competiciones va aumentando a medida que lo hace el calor. Toca hablar de otro de los puntos importantes, la “orientación”; es básica para nadar travesías: evitas nadar metros de más, por lo que tardas menos en llegar a meta, y si eres triatleta, ahorras energía para los siguientes tramos.
ANALIZA COMO Y POR DONDE NADAR
“Lo primero que debes hacer antes de una competición es conocer con antelación el recorrido que sigue la travesía”, y dónde estarán las boyas, sobre todo si es un circuito. Hay que mirarlo bien y estar atento a la charla previa de la organización. Y entonces puedes intentar ver la zona en la que nadarás, desde tierra. Podrás prever cuáles pueden ser algunos de tus puntos de referencia cuando estés en el agua.
Desde la playa puedes buscar puntos de referencia que te ayudarán cuando estés en el agua: una montaña, un faro, un edificio alto…Pero una vez en el sitio, con las boyas a la vista, hay que ser imaginativo: la dirección de las olas, la posición del sol o un barco fondeado también pueden resultar de ayuda.
Hay situaciones en las que puedes usar una referencia como si fuera la corchera de la piscina: la playa o un espigón, si estás nadando en paralelo; o la orilla si nadas en un río. En muchos casos basta con “leer” bien la zona en la que nadas, ser consciente de lo que te rodea y estar atento a cualquier posible desviación para orientarte bien.
Las olas, otros nadadores, un kayak, una roca…; cualquier cosa con una mínima altura te puede tapar la visión de una boya. Por otro lado, cuanto más cerca del agua esté tu referencia más tendrás que levantar la cabeza, y por tanto perderás más velocidad.
REFERENCIAS ALTAS
Cuanto más alta esté tu referencia, más fácil te resultará verla. Una barca se ve muy bien, pero suelen moverse mucho y de forma aleatoria; no son referencias recomendables. Si es posible busca puntos de referencia en tierra altos y que destaquen; por ejemplo: un edificio singular, un faro, la cima de un cerro, el final de un espigón...
PREPARA TU LLEGADA A META
Al final de la travesía siempre llega un punto en que se ve el arco de meta. Hay que estar atentos a cuándo llega ese momento, fijarse cuanto antes para ir directos a ella. Aquí es útil una visión más panorámica: si la meta tiene detrás un edificio o montaña que se ve bien, ideal; pero si no, probablemente tenga alguno un poco hacia el lado.
Ser capaz de mirar mientras nadas, sin bajar mucho la velocidad, es toda una habilidad; hay que entrenarla, también. Se trata de no perder el ritmo de nado mientras nos orientamos. En este último tramo es vital.
Llega el momento del esprint, tienes que estar seguro, tanto de tus fuerzas como de la correcta dirección a meta. La diferencia entre esprintar y esprintar mientras intentas encontrar el arco puede ser brutal, en segundos y en frustración.
MIS CONSEJOS:
1) “Lo ideal es poder haber realizado el recorrido con anterioridad”. Si no has podido entonces llega con tiempo suficiente como para estudiarlo a conciencia.
2) Para mí, el recorrido más corto no significa que sea el camino más rápido. Así que es muy importante saber todo lo posible sobre el trazado antes de competir.
3) Busca la marea más baja, aunque haya más metros. “Siempre he mirado por dónde va la corriente y cómo de fuerte es. Si va de izquierda a derecha, mi elección en línea de salida es también de izquierda a derecha, aunque sea ópticamente un recorrido con más metros”. La idea es aprovechar la corriente para que el ritmo hasta la primera boya sea más fuerte que el de los rivales.
4) Apunta alto para conseguir buenas referencias, algo que tenga la altura suficiente por si te encuentras con condiciones desfavorables en el agua que te impidan ver las boyas.
5) “Cuando nades contra las olas, no pelees contra ellas, y trata de nadar por debajo de ellas, intentando encontrar el ritmo entre tus brazadas y su llegada”. En estos casos, lo importante es “cadencia alta, buen agarre y una posición corporal alta que te facilite poder mirar a distancia”. Otra opción, es tratar de aprovechar el impulso de las olas, lo que se conoce como body surf: “Es una ventaja enorme. Llegas a la orilla mucho más rápido”.
6) ¿Se puede trabajar la técnica? Por supuesto, utiliza una calle vacía en la piscina y nada justo por el centro con los ojos cerrados. A los 10-12 metros mira tu desvío respecto la línea central para aprender como compensar en aguas abiertas.
7) Respira para ambos lados, además de evitar descompensaciones musculares o favorecer el rolido en ambos sentidos, respirar bilateralmente mejora nuestra orientación, ya que nos permite tomar referencias a izquierdas y derechas. Si vamos en un grupo, por ejemplo, y acabamos situados en uno de los lados, es posible que no veamos que está ocurriendo en el otro costado. Podemos perder el grupo y alejarnos de la trayectoria. Respirar a un lado puede suponer un problema también en caso de oleaje, imagina que las olas llegan por tu lado, ¡a tragar agua!
8) Para terminar: ¡Sé tu propio guía! No sabemos quién se orienta bien y quién no.
“TODO SE PUEDE ENTRENAR”: EL PAPEL DEL ENTRENADOR EN LA MOTIVACION DEL NADADOR
La natación es un deporte diferente a los demás. Los nadadores necesitan de una gran motivación. El despertar muy temprano, en algunos casos, incluso, hasta antes de que amanezca. Meterse al agua con frio y con sueño para luego regresar a las actividades académicas (colegio, universidad). Luego volver a los entrenamientos por las tardes, recibir instrucciones, salir del agua una y otra vez, realizar ejercicios y recorrer varios kilómetros. Todo esto añadido al acostarse temprano, limitarse las salidas con amigos, pasar días enteros en competencias y la presión ejercida por los entrenadores, a veces, familiares e incluso la de los nadadores mismos hacen de la natación un deporte que produce mucha tensión a la larga.
Estos fundamentos descritos nos dan pistas del porque la natación es uno de los deportes con mayor índice de abandono, ya sea por desgaste físico, emocional o el peso de cargar con una rutina tan rigurosa, que a veces, no nos conducen a resultados deseados llevando a nadadores a decepcionarse y a “tirar la toalla”. Todo ello sumado a que en nuestro país la natación no recibe el apoyo suficiente por parte de los dirigentes.
De todas maneras, aunque los sacrificios son muy grandes, considero que merece la pena intentarlo. Y como todo, tiene solución. Aquí os menciono tres buenas razones para lograr que un nadador encuentre la motivación necesaria para desarrollar su carrera:
Lo cierto es que en un deporte con tantas exigencias y tan poco reconocimiento y apoyos, necesitamos encontrar la manera de mantener la motivación, sobre todo cuando el deportista tiene que elegir entre estudio/trabajo o carrera deportiva. Es aquí donde lamentablemente se produce la mayor tasa de abandono.
MI OPINION:
Llevo en el agua desde que he nacido, compitiendo desde los 9 años y hasta hace muy poquito en categoría máster. Soy entrenador desde el año 1988. Ahora, además, padre de dos nadadores.
Visto desde todas estas perspectivas he llegado a la conclusión de que “el entrenador es la pieza clave para conseguir la motivación necesaria en los nadadores, principalmente en los más jóvenes”. Creo que es fundamental conocer en profundidad a los alumnos, saber cuales son sus inquietudes, sus aficiones, para incentivarles en esos momentos en los que están un poco bajos y los hagan venirse arriba. El “vamos, venga” puede motivar unos días, pero solo con eso no hacemos nada. Por ejemplo, si nos enteramos que el alumno toca algún instrumento de música, no cuesta nada mirar unos vídeos en youtube para saber quiénes son los mejores exponentes, y tener así otro tema para charlar o crear más vínculo, seguro te lo agradecerá!
Intentemos dejar de lado en los entrenamientos frases como “volteas como mi abuela”, o después de la competición no solo destaquemos los errores cometidos; siempre es mejor una palmadita en la espalda y recalcar las cosas buenas.
Últimamente vengo recogiendo de varios padres de mis alumnos, probablemente será algo puntual y estoy seguro qué no pasa en todos lados, “quejas” sobre sus clubes por la falta de comunicación de los entrenadores con ellos y con sus hijos. Al parecer los entrenadores tienen puesta una coraza y evitan cualquier tipo de contacto.
Pienso que no pasa nada si nos tomamos cinco minutos para, cada cierto tiempo, tener una conversación con los padres de los niños y enterarnos como le va en el colegio, o cualquier otro tema relevante.
El entrenador no es únicamente entrenador entendiendo por tal al responsable de preparar física y técnicamente a los nadadores; es también un educador que explícitamente transmite una serie de valores al grupo, e implícitamente, currículum oculto, con sus actitudes y comportamientos. También dirige a un grupo humano con unas características concretas en un marco determinado y en donde las relaciones interpersonales juegan un papel muy importante. Por ello la comunicación debe ser fluida y constante.
Considero primordial “conectar” con mis alumnos. No podría dar clases a un grupo, o a una persona, si no me demuestra que está a gusto, que se siente seguro, que cree en lo que le transmito, que confía en mí. Estoy convencido que “todo se puede entrenar”, y esa conexión también. Solo es cuestión de tomarse el trabajo de educar como una vocación.
"IR A REBUFO O DRAFTING": SU IMPORTANCIA EN AGUAS ABIERTAS Y TRIATLON
Los ciclistas, los pilotos de coches y motos de carreras, incluso los nadadores que han entrenado en un grupo en piscina, todos conocemos los beneficios de mantenernos pegados al que llevamos delante. Como nadadores de aguas abiertas o triatletas, tomamos la salida en una carrera o travesía, vamos de boya a boya nadando en fila india, creando una línea recta, donde aparentemente todo el mundo persigue al que lleva delante. Siendo así ¿Cuáles son los beneficios del drafting, y cuál es la posición ideal para colocarte con respecto al que llevas delante?
Todos los que, en mayor o menor medida, hemos hecho natación sabemos de primera mano que tirar primeros en los entrenamientos es más duro que ir detrás de algún compañero. Esto se debe al drafting, que nos permite seguir el ritmo de nadadores que son más rápidos que nosotros. Estudios contrastados aseguran que en aguas abiertas nos permite reducir en un 30% o más el esfuerzo yendo a la misma velocidad, y a los triatletas os permitirá ir menos cansados al coger la bici y correr. Grandes ventajas en principio, ¿verdad?..Pero al final son solo datos estadísticos, habría que tener en cuenta muchos factores para hablar de números tan concretos. Vamos con lo que considero más importante a la hora de abordar este tema:
Tipos de drafting:
Pues bien, hay dos tipos principales de drafting en natación, el de pies y el lateral. El primero es el más utilizado y consiste en ir en línea tras el rival aprovechándote de su estela. Al principio puede parecer muy incómodo, por este motivo debemos entrenarlo antes de una competición. La clave está en relajarte, distanciarte unos 30-70 cm del nadador que tienes en frente y aprender a nadar con agua turbulenta. Si nos incomoda, en aguas abiertas también podemos optar por el drafting lateral, con menos aguas agitadas pero menos efectivo en cuanto a la reducción de esfuerzo. Nos situaremos a la altura de la cintura de nuestro rival para conseguir mayor eficiencia. Una de las ventajas de este drafting es que tienes mejor visibilidad para orientarte.
Porque precisamente la desorientación es una de las mayores desventajas de ir a rebufo. Al hacer drafting en natación, tendemos a no levantar la cabeza para coger referencias y trazar una línea recta. En consecuencia, podemos acabar haciendo un mayor recorrido si la orientación del nadador al que seguimos no es buena. Otro inconveniente del drafting en natación, en especial del lateral, es la posibilidad de recibir golpes al nadar tan cerca de otros nadadores. Pero si sabes cómo gestionarlo, el obstáculo se convierte en oportunidad.
Entonces, ¿cuándo debemos hacer drafting en natación? Lo más recomendable es que si tienes poca experiencia te pongas a rebufo desde el primer momento siguiendo un ritmo un poco mayor al que estás acostumbrado, y siempre controlando si vas bien orientado. Si por el contrario tu nivel es alto, puedes empezar a gestionar tus estrategias y decidir si es conveniente o no utilizar el drafting para llegar al final de la carrera más fresco que tus rivales.
Como aprender o perfeccionar el drafting:
Se puede aprender o practicar en la piscina, pero ojo, para entrenar mejor en aguas abiertas. Principalmente porque existe un gran inconveniente, la orientación: nadie te asegura que tu guía no se vaya a despistar y terminéis los dos a cien metros de la boya…
De todas formas en piscina os recomiendo que practiquéis siguiendo los pies de un compañero, o en una calle vacía ponte a nadar a la altura de sus caderas en el caso del drafting lateral.
Lo ideal es entrenar en aguas abiertas saliendo en grupos reducidos en los que el ritmo medio sea acorde con el tuyo. No luches por liderar el grupo, afloja un poco el ritmo y colócate a cola. Luego vais cambiando el relevo hasta que todos paséis por la cabeza del grupo.
MIS CONSEJOS:
Tras toda esta información, ¿Debemos fijarnos solamente en los beneficios del drafting, independientemente de mi nivel, experiencia y objetivos como nadador? Rotundamente, no! Una vez dominemos al máximo posible la técnica de nado como el control del ritmo y tengamos una experiencia adecuada, mis objetivos y estrategia en la competición determinarán mi tipo/s de drafting a utilizar.
Dicho esto, para mí, lo más importante es llegar bien entrenado a la competición, a partir de allí el drafting se convierte en un factor más, no determinante. Personalmente, en campeonatos nacionales acostumbraba a empezar a rebufo y hacía un cambio de ritmo, dependiendo de la distancia, cuando faltaban 2-3 km para la meta. En cambio, en competiciones internacionales, donde el nivel era más alto, iba a rebufo en la mayor parte de la carrera para poder ir a un ritmo más alto, optaba por el drafting lateral en el último kilómetro y cambiaba de ritmo en los últimos metros para llegar lo antes posible a meta.
Sea como sea, el drafting en natación puede ser una buena opción para aguantar carreras de larga distancia. Pero cuidado! “Solemos ver el jardín del vecino más verde que el nuestro, y no nos damos cuenta que a veces también tienen rosales con espinas”. Yo prefiero mantener bien verde el mío sin preocuparme por el de los demás. Por ello, como todo, tienes que practicar si no tienes mucha experiencia, y si estás acostumbrado entrena a conciencia sabiendo que tu rendimiento no debería depender necesariamente de ir a rebufo.
NIÑOS EN LA ELITE DE LA NATACION, ACIERTO O ERROR?
Krisztina Egerszegi, con 14 años de edad se convirtió en la campeona olímpica en natación más joven de la historia. Lo logró en los Juegos de Seúl 88, en la prueba de 200 espalda (consiguió la plata en los 100 espalda). Tal proeza, hoy en día sigue siendo tema de muchos estudios e investigaciones, con el fin de comprender y conocer a estos talentos deportivos para así llevarlos al alto rendimiento a una edad más temprana. La metodología más utilizada en la actualidad es la observación. Para ello existen multitud de test fisiológicos y técnicas que nos permitirán observar las capacidades de los niños y valorar si estamos ante futuros talentos.
Sea como sea, cuando un niño de 10-12 años se entrena a diario debe ser objeto de un seguimiento médico más exhaustivo. El seguimiento médico se debe llevar para detectar posibles anomalías que repercutan negativamente en el estado de salud. “Además debemos tener en cuenta que un entrenamiento intensivo diario puede llevar al sobreentrenamiento, por lo tanto se han de realizar test diarios para observar posibles problemas: pulsaciones en reposo, variaciones en el R-R (ritmo respiratorio) inusuales, variaciones de peso, dificultades en el sueño, etcétera”.
Límites físicos que no habría que sobrepasar:
Para niños de 10-12 años el trabajo de hipertrofia muscular podría dar problemas en el crecimiento y evolución natural. Fuerza máxima y potencia pueden ser perjudiciales, por repercutir
mecánicamente en tejidos en desarrollo o maduración.
A estas edades, tampoco podemos trabajar con altos límites de acidosis y lactato, ya que son contraproducentes para el desarrollo. Aquellas disciplinas con predominio anaeróbico deberán ser
entrenadas con no excesivas repeticiones y mayor tiempo de descanso/reposo.
MI OPINION:
Cuando los entrenamientos están bien orientados y no afectan las relaciones sociales ni las obligaciones de niños y adolescentes, “suponen un complemento para ayudar a crear valores como el compañerismo, la tolerancia a las frustraciones, la competencia sana. Si hablamos de un reto de alto rendimiento, tendremos que tener una gran base deportiva general (no sólo de una única disciplina deportiva) y una evaluación fiable de que estamos ante un talento deportivo”. La nadadora mencionada es una de las mejores de la historia, un caso excepcional, pero me temo que para alcanzar tales éxitos su cuerpo y su mente han tenido que ser exigidos al límite, algo que no recomiendo a esas edades. Insisto en que el trabajo principal es el técnico, y una vez los niños estén desarrollados física y psicológicamente, es en ese momento cuando podemos plantearnos entrenamientos acordes para retos de gran magnitud como pueden ser unos juegos olímpicos.
2 CLAVES FUNDAMENTALES PARA TRIUNFAR EN AGUAS ABIERTAS
Si eres nadador de aguas abiertas o triatleta, en mi opinión, has elegido una de las modalidades y disciplinas más exigentes y agobiantes que existen. El conocimiento y control de la misma, harán de ti un gran deportista, un gran competidor, un gran hombre.
Definamos tu estructura y preparación en dos bloques fundamentales que pueden ser la clave del éxito: cuerpo y mente.
CUERPO:
En términos de fisiología, debemos reconocer que esta modalidad, sobre todo en alto rendimiento, es relativamente nueva, y no abunda demasiada literatura científica al respecto. Sí tenemos claro que debes desarrollar una gran capacidad de tolerar ritmos de nado cercanos a tu vo2max y poseer un buen sprint final, en la mayoría de los casos.
Hablando de entrenamiento, procura explorar y desarrollar esta capacidad en todas sus posibilidades. Además de nadar, corre, rema, pedalea, salta a la cuerda, etc. Y siempre que puedas busca desafiarte y alcanzar nuevos retos. Y si te estás iniciando en el tema, te aconsejo asesoramiento profesional.
Todo proceso de entrenamiento demanda de una correcta recuperación. Será fundamental que respetes tus tiempos de descanso, que recurras a terapias de regeneración como los masajes, fisioterapia, crioterapia, etc. Y que cuides al detalle tu nutrición.
En el agua destacamos varios puntos fundamentales:
– La técnica: el pilar más importante, de nada sirve aumentar metros o intensidad en tus entrenamientos si no dominas la técnica. Todo comienza con una buena posición de tu cuerpo, que junto con la estabilidad de tu tronco, una patada efectiva, y una brazada larga y fluida serán cruciales; sobre todo para “economizar energía” en las largas distancias.
– El control de variables del medio: viento, olas, orientación, alimentación/hidratación.
– Tu experiencia: conocer a tus rivales, los circuitos, las condiciones a las que te vas a enfrentar, te permitirán de antemano, desarrollar un plan con la que podrás beneficiarte del drafting, las corrientes, de la técnica y estrategia de nado que emplearas, de las gafas o tipo neopreno más adecuado, etc.
MENTE:
He aquí el Quid de la cuestión! Tu preparación psicológica.
En los deportes de resistencia, la mente es la que manda y gana las competiciones. Sin lugar a dudas…
Es la que te ayuda a mantenerte en foco, a luchar por tu objetivo, tu sueño. Es quien saca fuerzas para madrugar cada día, para no fallar ni a uno de esos agobiantes entrenamientos. Es la que tira para un lado o para el otro cuando tienes que decidir entre salir con tus amigos o ir al gimnasio, entre comer una fruta o una tarta de chocolate, o entre soportar el dolor e intentar ganar una prueba o rendirte en el intento.
Es tu mejor amiga, tu aliada, la única que verdaderamente cree en ti y la única capaz de hacerte conquistar lo imposible….
Entrenar este aspecto:
La psicología deportiva, el coaching y terapias como la meditación o el mindfulness son grandes y potentes herramientas que pueden ayudarte a consolidar conceptos claros sobre ti y tus objetivos. Pero ojo, pienso que estas nuevas tendencias a veces pueden jugar en nuestra contra si abusamos de ellas. Creo que debemos ser capaces de superar dificultades, y acostumbrarnos a solventar los problemas por nuestros propios medios.
Este es sin duda el as que puedes esconder bajo tu manga, sobre todo en competiciones de largas distancias o a la hora de aspirar a un podio.
MIS CONSEJOS:
Busca tu propio método, para casi todos nosotros conseguir metas es a base de perseverar, de esforzarse, de realizar unos sacrificios, de llevar un orden, una disciplina, sobre todo la que hemos elegido. Renueva tus objetivos cada año, que sean ambiciosos y que te resulten difíciles, no hay mayor satisfacción al cumplirlo.
En esta disciplina no existen los genios, no conozco a ningún nadador o triatleta que haya hecho podio inmerecidamente. Todo es a base de trabajo y más trabajo, puedes tener un día inspirado, pero detrás hay muchas horas de dedicación...Porque como decía el genio de la pintura malagueña Pablo Picasso: "Para cuando me llegue la inspiración, que me encuentre trabajando.
Sobre el autor:
Daniel Campagnolo vive y respira la natación desde que era un niño. En su palmarés deportivo se destacan victorias nacionales (Junior) en su país natal Argentina, como nadador de medio fondo y fondo. En aguas abiertas, destaca el primer puesto en el tramo de 20 km en la maratón acuática Santa Fe – Coronda, actualmente incluida en el circuito mundial de aguas abiertas de la FINA.
En lo profesional es Entrenador Superior de Natación, Profesor de Educación Física, Técnico en Salvamento Acuático y Socorrismo y Entrenador Nacional de Musculación y Especialista en Biomecánica de natación. Su trayectoria como deportista, sumada a una completa y continua formación y experiencia adquirida durante más de veinte años, le han permitido trascender y desarrollar sus propios métodos, como el video análisis, orientados a las diferentes ramas de la natación, especialmente en la formación de jóvenes nadadores, masters y triatletas.
Hoy en día es Socio-Fundador y Director de Acuatiq Innovations, Entrenador del Acuatiq Team en el Euromeet de Luxemburgo (2017 y 2018), Swim Open de Estocolmo (2018), Open de Lisboa (2018) entre las más destacadas. Ahora continúa su carrera deportiva como nadador master siendo campeón de Madrid y Top Five Rfen.